Tips fundamentales para “dar piso” a tu PYME

 
 
¿Tenés una muy buena idea y querés lanzarla? Acá te contamos lo básico para iniciarte en el mundo de la pequeña empresa.
 
 
Día a día son más las personas que eligen impulsar un micro o mediano emprendimiento, ya sea en la búsqueda de alternativas a las formas “tradicionales” de trabajo, por no querer tener jefes, o simplemente por apostar a vivir de una pasión. En cualquiera de los casos, pasar del horario de oficina al mundillo “hágalo usted mismo” puede ser todo un desafío. Es un camino que requiere perseverancia y paciencia, pero que puede entregar grandes recompensas. Más aún si tenemos en claro algunos puntos.
 
 
Uno de ellos es la financiación. Si no disponemos de un capital para comprar herramientas o insumos, tendremos que pedir a otras personas que inviertan en nosotros. Ya sean amigos o familia que pueda ayudar, crowdfunding u otro tipo de campañas focalizadas en la comunidad, hasta préstamos personales online que se acreditan sin demoras ni largos trámites, hasta el tradicional préstamo en el banco que exige presentar una mayor cantidad de documentos. Cada una de estas herramientas tiene sus ventajas particulares y es muy importante analizarlas a fondo para tomar la mejor decisión.
 
 
También es importante preguntarnos por nuestro “público”. Conectar desde otro lugar con los clientes es algo que muchas personas buscan al momento de emprender. Generar un vínculo más cálido y direccionado, donde se valore el trabajo y el tiempo ofrecido aplicado en él, así como el tiempo del consumidor y su integridad.
Lo central es pensar qué quiere y busca nuestro potencial cliente y qué novedad podríamos brindarle. Al principio siempre estaremos haciendo foco en segmentos reducidos de público. Pero es importante diagramar metas a corto, mediano y largo plazo que nos motiven no sólo a superarnos sino a mantener el proyecto activo y dinámico.
 
 
Quizás empecemos vendiéndole anotadores artesanales a nuestro círculo más cercano, para descubrir que, agregándoles ilustraciones de películas o series populares, podríamos ofrecérselas a otras personas más alejadas de nosotros. Así encontraríamos maneras de ampliar nuestro trabajo y nuestra cartera de clientes.
Luego, dependiendo la actividad que realicemos y nuestro gusto personal, tendremos distintas formas de organizar nuestro día a día laboral. No será igual el proceso de un emprendimiento de pastelería que el de una pequeña editorial. Ya sea que trabajes bien temprano en la mañana o a la noche, es crucial establecer horarios de producción y de distribución o venta.
 
 
Internet es un canal excelente para ofrecer y comprar productos de pequeños y medianos emprendimientos, por su rapidez, masividad y bajo costo. Una cámara o un celular, redes sociales o tienda online y listo: ya podés empezar a vender. De hecho, como mencionamos más arriba, los canales digitales también abren paso al acceso a préstamos personales online, que sin dudas pueden ser una base de apoyo para el arranque de muchas PYMES necesitadas de financiación.
 
 
Otro factor vital es llevar un registro minucioso de las entradas y salidas de dinero que tengamos. Ya sea porque tenemos que pedir adelanto antes de producir, porque cobramos envío dependiendo la zona o porque tuvimos que hacer una compra de emergencia, es muy importante hacer cuentas y tener los números claros. Ya sea con una agenda o desde una app, tiene que ser un ejercicio diario.
 
 
Con esta información básica, ya se puede empezar a diagramar el sueño de la propia empresa.
 
 
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