Ahorrar en gas es una cuestión de buenos hábitos más que de trucos complejísimos. Incluso en invierno, cuando en muchos sitios (hogares, comercios, oficinas, etcétera) este recurso es fundamental para sistemas de calefacción y de agua caliente, es posible lograrlo. Tal como señalamos, el secreto es seguir una serie de buenas prácticas.
Por lo demás, en función de los consejos para ahorrar gas es importante notar que los sistemas de calefacción funcionan en forma más eficiente (y en tanto, gastan menos) cuando se realizan los mantenimientos necesarios. Una falla usual es la presencia de are en los circuitos, que afectan el buen funcionamiento de estos equipos. La recomendación es realizar un “mantenimiento cruzado” o “fuera de temporada”; es decir, revisar el aire acondicionado en invierno y la calefacción en verano.
Otro dato a tener en cuenta aquí, realizar periódicamente el mantenimiento de las cocinas a gas para que evitar pérdidas que, además de suponer un riesgo, generan un mayor consumo mensual.
En este punto, otro buen consejo para ahorrar gas es utilizar durante el invierno (especialmente durante la noche) la ayuda de las persianas bajas como aislante, además de cortinados gruesos que actúan como una barrera entre el exterior y el interior del hogar.
A fin de cuentas, se trata de un recurso del que disponemos en forma gratuita y que deberíamos aprovechar con la mira puesta en la eficiencia y en el ahorro, además de en el cuidado del medio ambiente.
No abusar de los sistemas de calefacción: En ocasiones, las prácticas más obvias son las más obviadas. La paradoja en este caso es la siguiente: ¿es necesario pedir a los sistemas de calefacción que climaticen la casa con una temperatura superior a la de un día de verano? Así, el consejo para ahorrar en gas es mantener una temperatura en torno a los 20 grados. Esa cifra será suficiente para tener una sensación agradable. Un detalle a tener en cuenta: en términos generales, por cada grado que aumentamos en los sistemas de calefacción, el consumo se incrementan en un 7%.
Ahorrar gas no se trata sólo de la calefacción: En muchas casas, el agua caliente depende de equipos que funcionan a gas. Por eso, cuando pensamos cómo ahorrar en gas también es preciso tener en cuenta otros aspectos además de la calefacción. Por caso, se recomienda tomar duchas cortas y no abusar del agua caliente cuando abrimos la canilla.