Ahorro, divino tesoro. ¿Cuál es el mapa para encontrarlo?

Más allá de los manuales de economía que definen los diferentes tipos de ahorro de un modo formal (por ejemplo estableciendo las características del ahorro público y privado), existen diversas modalidades para este buen hábito a las que deberías sumarte para conseguir la tan deseada salud financiera. En esta nota de Adelantos.com, una compañía especializada en préstamos rápidos por Internet, hablaremos sobre esas buenas conductas relacionadas al atesoramiento condensándolas en los cuatro ítems que siguen.

1 -  Suavizá tus consumos: aquellos que se preguntan cómo ahorrar dinero deberían probar esta modalidad sobre la que no hay mucho para explicar. Sencillamente, se trata de ahorrar una parte de los ingresos para usar esa plata en el futuro. Suena fácil, aunque no lo es. La buena noticia es que hay algunas claves para llegar a buen puerto, en primer lugar, la organización financiera, seguido de constancia y disciplina. En el futuro, el ahorro servirá para sacarte de un apuro, como un fondo de retiro, para darte un gusto, y/o para cumplir tus objetivos.

2 – Creá un fondo de emergencia: esta variable entre los tipos de ahorro debe atesorarse en forma separada a otros fondos. En este caso, se trata de una suma de dinero que será utilizada en caso de un imprevisto, que en la vida de todos siempre aparece. Desde un período de desempleo, hasta la reparación del auto o del hogar. Por otra parte, la actual crisis que deriva de la pandemia de coronavirus nos ha demostrado cuán relevante es contar con un fondo de emergencia en ocasiones que, aunque absolutamente inesperadas, se presentan y nos afectan.

3 – Pensá en un fondo para el corto plazo: cuando pensamos en ahorro, usualmente imaginamos un fondo de dinero que no será utilizado en el cortísimo plazo. Sin embargo, es una buena idea separar una suma para gastos más cercanos que lejanos. En rigor, una estrategia válida e interesante es establecer diferentes tipos de ahorro en términos de temporalidad, destinar una cantidad de dinero para el corto plazo, otra para el mediano y otra para el largo. Para eso deberás, también, definir tus objetivos y volcarlos en la planificación de tus finanzas.

4 – Pensá en tu retiro: si bien el Estado prevé una jubilación luego de la vida laboral, siempre es bueno generar un fondo para utilizar en ese momento de la vida. Existen diversos modos para hacerlo, siendo lo ideal mantener esa suma en alguna inversión, no sólo para que genere rentabilidad y la suma aumente, sino para que no sea accesible a tiempo completo y se utilice en caso de una emergencia mucho antes de los días de jubilación.



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